Gastos de Keiko Fujimori durante la campaña electoral no cuadran

Ya todos saben que Keiko Fujimori Higuchi realizó una millonaria campaña para tentar la presidencia de la República con los generosos aportes de sus correligionarios y simpatizantes. Lo que pocos conocen es que algunas cifras otorgadas a la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) no cuadran.

Si bien pudo demostrar que desde el segundo semestre del 2010 hasta el cierre de campaña alcanzó a reunir S/. 18’250,049 en efectivo por donaciones y actividades proselitistas –como rifas y cocteles–, no pudo hacer lo mismo a la hora de rendir cuentas. 

Según verificó la ONPE, ni la tesorera principal de Fuerza 2011, Antonieta Gutiérrez Rosti, ni la tesorera alterna y amiga personal de la candidata, Adriana Tarazona de Cortés, entregaron la información solicitada pese a que se le  reiteró ese pedido.  

Así, en el Informe Final de Verificación sobre la Información Financiera de Fuerza 2011 se indica que ese partido declaró gastos en publicidad electoralcontratada solo en medios de comunicación ascendente a S/.18’619,680. 

En pocas palabras, o mejor dicho con una resta simple, es evidente que lo recaudado no les alcanzó, pues faltaron S/.369,631.

Con esta información una pregunta cae por sí sola: ¿acaso este partido no tuvo otros gastos además de la publicidad en medios? Pues la respuesta es sí. Tanto es así que Fuerza 2011no declaró haber realizado el gasto de ese mismo concepto, en diferentes medios de comunicación, ascendente a S/.884,916. Pero además, parte de esa publicidad fue contratada por personas distintas a la tesorera del partido, contraviniendo lo establecido en la Ley de Partidos.

Sin embargo, eso no fue lo único. Tampoco rindieron cuentas sobre los gastos que demandaron los mítines de campaña realizados tanto en Lima como en lugares tan alejados como Pampa de la Quinua, en Ayacucho.

En total fueron 46 los mítines cuyo financiamiento no declararon, pese a que en febrero Gutiérrez Rosti se comprometió con la ONPE a completar esos datos.  

Esa institución indica en su Informe Final que es evidente “que la organización y desarrollo de un mitin conlleva gastos relacionados con elementos como parlantes, estrado, banderolas, equipos de sonido, movilizaciones, apoyo logístico, entre otros, los cuales deben ser identificados e incluidos en las rendiciones de cuentas”. 

Sin embargo, eso es algo que omitieron en Fuerza 2011. Igualmente, el partido deFujimori Higuchi no informó cómo pagaron los 48 viajes de la candidata y su comitiva durante la campaña electoral al interior del país. 

Al ser consultada sobre este punto, el documento cita que “la tesorera manifestó desconocer el costo involucrado en los viajes de la candidata y sus acompañantes”.

Y por esto, si se tiene en cuenta que  su comitiva superaba las 20 personas, un viaje aHuanchaco, Huánuco, Puerto Pizarro o Andahuaylas no debe haber sido inferior a los 10 mil nuevos soles, por cada lugar, solo en transporte vía áerea, sin contar con el hospedaje, la alimentación y la movilización interna. 

Ni siquiera incluyeron en la rendición de cuentas los gastos correspondientes al pago de los locales de campaña donde funcionaron nueve comités distritales durante el proceso deElecciones Generales 2011, ni mucho menos la fuente de financiamiento que cubrió dichos gastos. 

A todas esas irregularidades se le suman los S/.144,417, aportados en efectivo y depositados directamente en la cuenta corriente del partido por personas que no pudieron ser identificadas.

Otro de los incumplimientos de esta agrupación política se refiere al tiempo en exceso que contrataron en diversos medios de comunicación. Según el artículo 40° de la Ley de Partidos Políticos, la publicidad a contratar en cada estación de radio y en televisión no debe exceder los cinco minutos diarios, pero eso no lo respetaron. En algunos casos el exceso superó, incluso, los nueve minutos.

Igualmente la ONPE puso en cuestión que, si bien el partido declaró haber recibido 350 mil soles de 55 de sus candidatos al Congreso, dichos aportes no fueron declarados en su totalidad por ellos, por lo que no pudieron confirmar la veracidad de dichas aportaciones. 

Es más, indican que les cursaron cartas de solicitud de confirmación de aportaciones a los candidatos, y tan solo respondieron siete. Incluso algunos, como Julio Rosas Huarangay María Magdalena López Córdova, que sí aportaron, no incluyeron ese aporte en su rendición de cuentas.

Y como era de esperarse, tras las actividades de financiamiento proselitista (el coctel fujimorista 2010, cóctel naranja 2011 y el cóctel fujimorista 2011) no se pudo identificar a los asistentes pues no existió un registro.

Al respecto el partido fujimorista respondió que el reglamento no los obligaba a especificar quiénes adquirieron las tarjetas. ¿Una jugada maestra? Pues no. La ONPE les aclaró que sí debieron llevar un registro, como medida de control indispensable para un grupo político.

LA MILLONARIA RIFA QUE UNA SUERTUDA COBRÓ

“No hay ninguna observación del ente fiscalizador que es la ONPE”, indicó Fujimori Higuchi el día que le preguntaron sobre su cuestionada y millonaria rifa.

En realidad tenía razón, pues en el informe ese órgano solo señala que “revisaron los documentos sustentatorios de los gastos incurridos”. Nada más. Así para esa entidad fue claro que en Lima lograron vender 139,612 rifas a S/.10 c/u.

Sin embargo, en el Informe Técnico /EE.GG -2011  N° 006 -GSFP/ONPE sí fueron más exhaustivos con el cóctel fujimorista 2010 y con el cóctel naranja pues indicaron que faltó un registro.

Se debe recordar que el premio mayor fue una camioneta del año valuada en  S/.26,600 que nadie reclamó.

Asimismo, ese partido tuvo que entregar al Ministerio del Interior, junto con el vehículo, los otros 11 electrodomésticos que también fueron parte de esa actividad. Tan solo la esposa del fujimorista Jorge Trelles, Lucila Castro-Mendívil, recibió uno de los premios y se lo entregaron en su casa. Un hecho que generó muchas suspicacias, pues fue la única beneficiada. 

URGE REFORMA PARA PODER SANCIONAR

Piero Corvetto   

Gte . Imagen Onpe

Lo terrible de nuestras normas es que no existe una sanción por presentar tarde la información económica o por no presentarla. En la última contienda electoral se presentaron 23 partidos políticos y de estos Unión por el Perú, Siempre Unidos, Cambio 90, Despertar Nacional, Justicia Tecnológica y Ecología, y Adelante nunca presentaron un informe y no son pasivos de ninguna multa o penalidad.

Por eso es tan importante el proyecto de reforma, que no solo trata de fortalecer partidos, sino que precisa sanciones para los que no presentan dicha documentación sino para los que presentan tarde. Pese a ello, la ONPE sí multó a dos partidos, Perú Posible y Alianza para el Progreso, por haber recibido –en ambos casos– un aporte en exceso (de un solo aportante) al establecido por ley.

Sin embargo, aún nos falta concluir el informe final de Gana Perú, debido a que presentó su información de manera tardía.